Un líquido que cae del cielo tiene en vilo a la gente de Alicante, que no para de lanzar teorías desde hace una hora y media. Que si es el apocalipsis, que si la antesala de una invasión alienígena, que si el mar se ha dado la vuelta y nos va a ahogar…
Nadie tiene claro cuál es el origen de la presunta agua que está cayendo del cielo. Según fuentes de Google, las búsquedas de profecías acuáticas de Nostradamus han aumentado un 145% desde hace una hora en la provincia.
El Whatsapp ha tenido conatos de colapsarse, como ocurre en Navidad. Nadie hablaba de otra cosa que no fuera ese líquido que cae del cielo.
Los bañistas han salido corriendo del agua y de la playa, en busca de refugio. En el Mercado Central se han agolpado centenares de personas que no querían comprar nada. Lo mismo en El Corte Inglés, tiendas y bares de la ciudad. Cualquier techo era bueno para resguardarse de ese amenazante y desconocido líquido.
Un fenómeno que, además, ha venido acompañado de la desaparición del sol y el calor, lo que no ha hecho sino acrecentar la incertidumbre y, en algunos casos, angustia de los alicantinos y los turistas.
Unos fuertes rugidos procedentes del cielo ya habían anunciado que algo no iba bien. La gente corrió a la velocidad del trueno hacia sus casas.
El Ayuntamiento de Alicante llegó a emitir un comunicado urgente llamando a la tranquilidad de la población y asegurando que estaban estudiando a qué se debían los extraños acontecimientos que estaban sucediendo.
Dos horas después el sol reapareció y, mientras caían las últimas gotas, se pudo ver en el firmamento una especie de arco de colores. Hubo quienes aseguraron que era Dios. Otros que se trataba de una «performance» por la semana del Orgullo Gay.
Elucubraciones todas ellas, en cualquier caso. Ha habido quienes han recogido muestras del líquido procedente de las nubes para analizarlo y tratar de explicarlo todo. Quedamos a la espera de respuestas.