La Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana ha enviado un comunicado esta tarde anunciando la creación del «Smokesport», una práctica consistente en fumar mientras uno realiza deporte.
Esta nueva e insana disciplina es la única forma de, por ejemplo, poder salir a correr por tu ciudad sin necesidad de llevar puesta la mascarilla, después de que la Generalitat haya anunciado hoy nuevas restricciones a sumar a las ya existentes con el objetivo de frenar la escalada de contagios de coronavirus.
Entre las medidas añadidas figura la obligación, a partir del próximo lunes y al menos hasta el 15 de febrero, de usar la mascarilla mientras uno practica deporte dentro de núcleos de población, tanto si es por la vía pública como si la actividad física se lleva a cabo en una zona verde.
Sin embargo, curiosamente no consta en el nuevo paquete de restricciones la prohibición del tabaco en los mismos espacios públicos, cuando la emisión de aerosoles es tanto o mayor en el caso de los fumadores que de los deportistas.
También se deberá llevar mascarilla en la playa, salvo que durante tu estancia en la arena encadenes un pitillo tras otro, en cuyo caso no hay mayor problema que las oposiciones a sufrir cáncer de pulmón que uno hará.
Al parecer, el gobierno autonómico prefiere primar la recaudación de impuestos que genera el tabaco a favorecer prácticas saludables, pero que no dan diners, como es que la población realice deporte.
Los deportistas han propuesto a la Generalitat cambiar el manoseado lema de «las personas primero» por «los impuestos primero», ya que se adecúa más a la realidad de esta segunda nueva (sub)normalidad.
El conseller Vicent Marzà ha señalado orgulloso que deportes autóctonos como la pilota valenciana se pueden adaptar perfectamente al «Smokesport», ya que los jugadores disponen en todo momento de una mano libre para poder sujetar el cigarrillo.
