Una pareja británica residente en Benidorm acabó en Urgencias con una fuerte dermatitis genital después de haber usado gel hidroalcohólico como lubricante para sus relaciones sexuales.
Los afectados son un hombre de 37 años y una mujer de 35 que acudieron al servicio de urgencias del Hospital Marina Baixa, situado en La Vila Joiosa, tras sentir una sensación de ardor en sus partes íntimas poco después de haber practicado sexo.
Los médicos que atendieron a esta pareja de novios descubrieron que la irritación que sufrían, especialmente en la zona genital y en menor medida también en la boca, se debía al uso de gel hidroalcohólico a modo de lubricante, sumado a la fricción inherente al coito y a que ambos se habían depilado poco antes sus partes nobles.
El hombre explicó a los facultativos que la textura del desinfectante es muy similar a la de los lubricantes sexuales que suele utilizar por lo que, al carecer en ese momento de ninguno, optó por lo que tenía más a mano y se embadurnó el pene con el gel higienizante, invitando a su novia a hacer lo mismo en su vulva.
El paciente, que llegó al centro hospitalario al grito en inglés de «¡me quema ahí abajo!», refirió que ambos percibieron al comienzo de la penetración «cierta sensación de calor y un ligero escozor» que se fue incrementando durante los aproximadamente 15 minutos de duración del coito, que incluyó también episodios mutuos de sexo oral, según la versión aportada al personal sanitario.
«Me escocía tanto que me daban ganas de tirarme por el balcón«, dijo el británico.
La dermatitis de contacto (nunca más al caso) que presenta esta pareja natural del condado de Essex no es grave y remitirá en breve con la medicación por vía tópica que se les ha recetado y con una abstinencia sexual de una semana.
Los médicos han aprovechado este curioso caso para recordar que el gel hidroalcohólico no se debe ingerir ni tampoco usar para otros fines que no sean higienizantes.
Además, han indicado que no debe aplicarse antes de la masturbación, ya sea individual o en pareja, o al menos no hasta que la piel de las manos haya absorbido totalmente el producto y esté seca.