Multado en Elda por mear en la pierna al dueño de un perro que orinó en su portal

pis de perro

Un hombre de 36 años de Elda ha sido multado por miccionar en la pierna del dueño de un perro que había orinado en el portal de su casa.

Los hechos ocurrieron la mañana de este pasado viernes cuando J.B.S. salía de su domicilio en la avenida de las Acacias y, según su testimonio, vio cómo R.T.A. permitía a su mascota hacer sus necesidades en la entrada de su casa.

«No era la primera vez que dejaba ahí el pis del perro; ya lo había visto otras veces y le había pedido educadamente que impidiera que su perro mease ahí», explica el denunciado, quien admite que «harto» de soportar el olor y la suciedad, «porque encima el dueño del animal nunca lleva la botellita de lejía», decidió «darle de probar su propia medicina».

Esperó a que el dueño anduviera unos cuantos metros y cuando vio que estaba parado mientras su perro defecaba en mitad de la calle, abrió su bragueta y orinó sobre la pierna izquierda del ahora denunciante.

Al darse cuenta el afectado, comenzó una acalorada discusión que casi acaba llegando a las manos. Un par de agentes de la Policía Local se personó en el lugar y tomó declaración a ambos.

pipí de perro

Finalmente, el dueño del perro denunció a J.B.S. por un delito de exhibicionismo y la Policía hizo lo propio por orinar en la vía pública, sanción por la que tendrá que pagar 100 euros.

«Me da igual. Si vuelve a ocurrir, la próxima vez lo que haré, aunque me dé mucho asco, será mancharme las manos con el pis de perro y restregárselo por el pelo o por la cara, a ver qué le parece. Avisado está», advierte el denunciado.

Este singular suceso pone en evidencia la problemática urbana del incivismo de numerosos dueños de perros que permiten que sus mascotas hagan pis o defequen en cualquier parte, muy a menudo sin limpiar o recoger los excrementos.

Colectivos vecinales de varias ciudades de la provincia han solicitado a los ayuntamientos de sus respectivas localidades una mayor vigilancia policial para evitar estas conductas, así como la imposición de multas severas para disuadir a quienes sean reincidentes.

Y tú, ¿también sufres el pis de perro en tu portal o eres uno de los cerdos que lo permite?

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