En mitad de la polémica que ha estallado entre el Ayuntamiento de Alicante y la Generalitat Valenciana en torno a la idoneidad de disparar las mascletás de estas próximas Hogueras en su habitual emplazamiento en la Plaza de los Luceros, un grupo de alicantinos ha presentado una propuesta que no deja de sumar adeptos: celebrarla frente a la Oficina de Turismo del Puerto.
«Si la potencia de las mascletás tiene capacidad destructiva, bueno, no se nos ocurre un sitio mejor que frente al mamotreto», explican los impulsores de esta alternativa.
El Consell ha dado al Consistorio alicantino 10 días de plazo para presentar las medidas que piensa tomar para evitar que las mascletás puedan dañar el recientemente restaurado conjunto escultórico de la céntrica plaza.
El alcalde, Luis Barcala, que cogió el censo y llamó uno por uno a los habitantes de la ciudad, ha dicho tras ese referéndum telefónico que «Luceros es el sitio que los alicantinos quieren para disparar sus mascletás» y que, por tanto, de moverlas de allí, ni hablar del peluquín.
El concejal de Fiestas, Manuelo Jiménez, ha declarado que, dado que la esencia de la fiesta es el fuego purificador, «deberíamos plantearnos si no es mejor disparar las mascletás sin cajones y cuando se caiga la fuente, se vuelve a construir y listo». El edil hasta contempla la posibilidad de hacer una con los caballos más grandes, «en plan récord Guinness, que tenemos experiencia».
Compromís, convencido de que hay que velar por la conservación del patrimonio, ha lanzado de idea de que las mascletás se lancen en Valencia y sean retransmitidas en directo por À Punt a través de una inocua pantalla gigante que se instalaría en Luceros.
Muchos alicantinos esperan como agua de junio (la banyà) conocer qué opina sobre esta polémica de las mascletás en Alicante el alcalde emérito, Gabriel Echávarri, visto antes de la final de la Champions con la camiseta del Liverpool, para tener la certeza de que sucederá lo contrario.