Los pocos alicantinos o turistas que transitaban esta tormentosa noche de gota fría por el Puerto de Alicante se han visto sorprendidos por la escena inaudita de cientos de parejas de animales salvajes haciendo cola ante el embarcadero del Kontiki.
Fuentes policiales consultadas por Viscalacant aseguran desconocer la procedencia de esta gran manada animal multiespecie que aguarda con una paciencia cuasi humana a la apertura de la tabarquera, si bien todo apunta a que podría haberse escapado de algún modo de zoológicos y centros de conservación como Terra Natura, Santa Faz o el Río Safari de Elche.
Ni las fuertes lluvias ni los truenos que azotan la ciudad perturban ni un ápice el ánimo de los elefantes, leones, tigres, jirafas, monos, ciervos, gallinas, gallos violadores y demás parejas de macho y hembra que parecen querer subirse al barco que cubre el trayecto entre Alicante y la isla de Tabarca.
Grupos animalistas han señalado en las redes sociales, tras conocer la noticia, que lo más probable es que toda esta fauna haya pensado que la gota fría que castiga la provincia en las últimas horas es un nuevo diluvio universal, y el Kontiki sería lo más parecido al Arca de Noé.
Hay quien aventura que los animales han recalado allí tras comprobar que su primera opción, la réplica del Santísima Trinidad, no se encuentra en condiciones de aguantar la fuerza del mar durante el diluvio.
La exconcejala de Protección Animal del Ayuntamiento de Alicante, Marisol Moreno, se ha ofrecido a embarcarse con los animales para ejercer de Noé y «repoblar la Tierra» tras el acuático apocalipsis, noticia que ha sido muy celebrada por los grupos antiespecistas y también por sus detractores, aunque se han mostrado bastante escépticos sobre el futuro de la humanidad.