Nuevo escándalo con el todavía presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, como protagonista.
El controvertido dirigente no solamente besó sin su consentimiento a la centrocampista Jennifer Hermoso sino que poco después, cuando todas las jugadoras se encontraban celebrando en el vestuario la consecución del Mundial, envió en un mensaje de Whatsapp a toda la plantilla una fotopolla «por error, pero con todo el cariño», han señalado desde la Cope.
Esta nueva información, sumada al controvertido gesto en el que se tocaba los testículos en el palco junto a la Reina y la infanta Sofía, añade más presión a las peticiones de dimisión de un Rubiales que ha intentado quitar hierro al asunto asegurando, a través de su portavoz, el «periodista» Eduardo Inda, que quiso enviarles una foto institucional de su cara sonriente pero que, por su similitud con su miembro viril, acabó confundiendo una con otra.
El que fuera jugador-calentador de banquillo en el Alicante CF acompañaba la obscena imagen con el siguiente comentario: «Enhorabuena, campeonas, habéis ganado con un par, como el de esta foto». Un mensaje que enmarca en «un simple contexto de euforia por la victoria y de humor habitual entre deportistas».
Rubiales ha rogado a las jugadoras que no reenvíen el mensaje porque cuando se hizo la foto «acababa de salir de la piscina del hotel de concentración… y eso, la cosa estaba muy concentrada».
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha ofrecido a Rubiales un puesto en su formación política a Rubiales en el caso de que finalmente decida dimitir.
