La lista de condiciones de Echávarri para dimitir se amplía. El presunta y temporalmente socialista ha añadido esta tarde unas nuevas peticiones «adicionales e irrevocables» para presentar su renuncia a la Alcaldía de Alicante.
El regidor, que ha asegurado esta mañana que no dejará el cargo hasta que se le abra juicio oral y tenga la garantía de 15 votos para que le suceda Eva Montesinos, quiere ahora que el portavoz del grupo municipal popular, Luis Barcala, tenga sexo con un cerdo mientras la escena es retransmitida en directo por las redes sociales y las cadenas de televisión.
Echávarri se ha inspirado en el primer episodio de la primera temporada de la serie distópica «Black Mirror«, en cuyo argumento unos terroristas imponen al primer ministro británico esa zoofílica condición para liberar a la princesa que tienen raptada.
«Que lo haga, quiero que lo haga y no hay más vuelta de hoja«. Así de claro y contundente se ha mostrado en una rueda de prensa vespertina donde también ha exigido a Ximo Puig por escrito que peatonalizará la Explanada «pero con puente y túnel, las dos cosas».
Fuentes insolventes han asegurado a Viscalacant que la líder del PPCV, Isabel Bonig, estaría presionando a Barcala para que acepte la petición de Echávarri.
«No es la mayor cerdada que se habría visto en la historia de nuestro partido», afirma, convencida de que Echávarri no conseguirá los 15 votos para investir a su delfina y de que así el gobierno municipal acabará en manos de los populares.
«Siguiendo con las comparaciones con esa serie, Echávarri está desde hace tiempo en San Junípero y lo sabe», ha señalado Barcala, en alusión al capítulo 3×04 de la producción de ciencia ficción.
Mientras todo eso ocurre, con la lista de condiciones de Echávarri para dimitir sobre la mesa, el Ayuntamiento de Alicante se ha convertido en un zoco árabe donde los concejales de todos los grupos mercadean con sus apoyos, rechazos e intentos de obtener rédito político de la crítica situación de desgobierno municipal.
Que si Nerea Belmonte apoyaría un pacto de izquierdas si Miguel Ángel Pavón no pinta nada; que si Pavón, a su vez, descarta a Montesinos como sucesora por estar quemada por el episodio del cutremicro; y así todo…
«Black Mirror» languidece al lado de la realidad en la que nos tienen inmersos nuestros políticos. Se siente, Charlie Brooker, pero es que Alicante está de moda.