Las protestas callejeras por la dimisión del ya ex alcalde de Alicante protagonizadas por seguidores de Gabriel Echávarri han ocasionado graves destrozos en el Teatro Principal y su entorno.
Los fans más acérrimos del socialista, entre los que se contaban algunos votantes del PP preocupados por la posibilidad de que Luis Barcala acceda a la Alcaldía, recorrieron hoy las calles del centro de la ciudad para mostrar su rechazo a la renuncia de quien definieron en las pancartas como «un tío cojonudo».
La marcha, que partió simbólicamente de la Cruz de los Caídos, transcurrió con normalidad hasta llegar a la Plaza de Ruperto Chapí.
Los echavarristas y antibarcalistas observaron allí, entre la cartelería de la programación, que había una obra titulada «El funeral«, con la foto de un hombre calvo que les recordaba al ex alcalde.
Aunque se trataba del popular (popular de popularidad, no del PP) Antonio Resines, los manifestantes, en un arranque de ira muy propia de su líder, interpretaron que se trataba de una provocación y la emprendieron a golpes con todo lo que había a su alrededor, ocasionando graves destrozos en el Teatro Principal.
El resultado se puede ver en estas imágenes: desconchones en el inmueble y su entorno, que ha quedado seriamente dañado:
Montesinos propone crear un área arqueológica
La alcaldesa en funciones, Eva Montesinos, está barajando la posibilidad de aprovechar el tramo de la avenida de la Constitución peatonalizado desde principios de año para acotar toda la zona como espacio arqueológico, dado el aspecto ruinoso que presenta.
La entrada de la Generalitat como socio capitalista en el Teatro Principal es de esperar que revierta en una mejora del edificio, que vio hace poco cómo el andamio de una obra muy cercana se desplomaba y tiene pinta de querer emularlo con las grietas y desperfectos que luce.
Nota: El contenido del artículo es todo ficticio, como es habitual, salvo las fotografías, que desgraciadamente son reales al 100%.