¡Llega el metaverso alicantino! Luis Barcala, ya conocido como ‘el alcalde webcam‘, se suma a la fiebre por los entornos virtuales inmersivos y ha anunciado la creación de uno exclusivo del Ayuntamiento de Alicante que evitará tener que volver a celebrar plenos presenciales.
El dirigente popular, que se siente muy cómodo en su particular Matrix, ha subrayado que «debemos estar a la vanguardia en tecnología y, en pleno siglo XXI y con la pandemia todavía azotando la salud de todo el mundo, lo más prudente, cómodo y ventajoso es recurrir a los metaversos, que viene a ser como estar pero sin estar».
Así las cosas, gracias a este futuro metaverso alicantino, la concejala de Unides Podem Vanesa Romero no tendrá en lo sucesivo motivos para quejarse del aire acondicionado machista del Consistorio, ya que podrá asistir a los plenos desde el feminista calor de su hogar.
Al sustituirse las siempre indiscretas cámaras del ordenador por avatares, nuestros representantes municipales podrán poner los suyos en modo estático, de modo que cada concejal podrá dedicarse durante el pleno a sus vicios: zampar bollos y hacerse fotos (Mazón), fumar y jugar a la X-Vox (Barcala), hacer crossfit (Xavier López), tuitear (Bellido), atender el telefonillo (Mas), pensar en Franco (Sanguino y Ortolá, cada uno al suyo), crear bulos (Lidia López), ladrar y caer mal (Julia Llopis), estar en Madrid (Jiménez), aburrirse mucho (Sánchez) o simplemente dejar pasar el tiempo hasta cobrar a fin de mes (la inmensa mayoría).
Para la puesta en marcha de este pionero metaverso plenario, el titular de Cultura, Antonio Manresa, sugirió a «El Plasmas» (así llaman a Barcala los de Ciudadanos), contratar los servicios del insigne y mundialmente reconocido experto en criptomonedas y metaversos John Squire, antes conocido como el edil de Cs Juan Francisco Escudero y, antes de eso y de su liposucción, conocido como admirador number one de Sonia Castedo, motivo por el cual Barcala descartó la propuesta, trasladándole su negativa a través de un Facetime, que lo de hablar cara a cara está demodé, y dándole una propinilla vía Bizum por las molestias.