Diez políticos con vómitos, seis asesores con diarrea, cuatro gorrones con empacho y dos gatos callejeros en coma inducido tras zamparse las sobras es el balance de afectados que dejó la comida perpetrada por los concursantes de Masterchef Celebrity en Alicante.
El «talent show» culinario de Televisión Española emitió anoche el programa grabado el pasado mes de junio en Alicante, donde se rodó la denominada prueba de exteriores en la que los concursantes deben preparar un almuerzo para numerosas personas de la ciudad que visitan.
La grabación de Masterchef Celebrity en Alicante se desarrolló primero en la Zona Volvo para presentar allí a los participantes el menú diseñado para la ocasión por la chef María José San Román, que luego habrían ellos de intentar reproducir.
Todo ello con el fondo de mareantes veleros dando vueltas en círculo delante de las cámaras. Así, en plan casualidad.
La cocina para este reto de los famosos ayer capitaneados por Silvia Abril se instaló en la terraza del restaurante Monastrell, propiedad de San Román, conocida como la «Reina del Azafrán» y que está situado en la transitadísima zona de Panoramis.
Desde esa ubicación las cámaras mostraron unas panorámicas de Alicante muy vistosas. Sin embargo, desde la grabación de ese programa, la ciudad se ha descolorido un montón, pues ni el agua es ya tan azul ni las palmeras tan verdes.
El menú de la mujer que cocina los arroces con la olla exprés, que sirve con los platos invertidos y que saca de los champiñones mucho glutamato monosódico (umami para los amigos, tranquilas las mamás: no es ninguna droga), le vino ciertamente grande a los concursantes.
Tanto fue así que la mitad del medio centenar de invitados a la comida acabó con problemas estomacales o intestinales, mientras que la otra lo hizo con hambre.
En la lista de comensales, muy parecida a la del pasaje del avión a Göteborg, figuraban numerosos políticos de la ciudad, encabezados por el alcalde en funciones judiciales Gabriel Echávarri, que acabó vomitando, y el presidente-emperador de la Diputación, Ave César Sánchez, que sólo tuvo arcadas pero fue por ver un tuit de Marzà en la pantalla de su móvil.
Junto a ellos, ediles del todavía tripartito como la imputada Eva Montesinos, el vacilante Natxo Bellido y el defenestrado Víctor Domínguez; la popular ma non troPPo Mari Carmen de España, asesores como el socialista también imputado Lalo Díez, versos sueltos como Fernando «nomepierdouna» Sepulcre, diputados como Eduardo Dolón (otro imputado) y Agustín Navarro, la «primera dama» municipal Beatriz Vidal y acoplados de diversa procedencia.
Los platos preparados por los concursantes, según han confesado a Viscalacant algunos de quienes los sufrieron, apenas rebasaban el nivel de lo comestible.
«Pero las cámaras son las cámaras y tienes que disimular; no ibas a escupir lo que te habías metido en la boca, por más ganas que tuvieras», afirma uno de los luego diarreicos.
El montaje del programa obvió, lógicamente, las caras de asco y estupor de los comensales, uno de los cuales llegó a identificar un perdigón de Bibiana Fernández en su plato.
«Al principio pensé que era alioli, pero luego vi que los platos de mis compañeros no llevaban y comprobé que era baba blanca de esa que se queda pegada en los labios. Como no se calla… Debería ficharla Echávarri para el Debate sobre el Estado de la Ciudad«, bromeó con sus compañeros de mesa al volver del baño.
Tampoco se vio en televisión el arroz azul que les salió a los concursantes al confundir Anabel Alonso, que es daltónica, una botella de Curaçao Blue con el azafrán líquido de la estrellada chef alicantina:
Si tienes tres horas y quieres ver el programa íntegro puedes hacerlo pinchando aquí.